Podría decir que es una de mis tartas favoritas, porque esa textura es la que siempre he tomado en una tarta de queso, porque no lleva base de galleta, y porque tiene un dulzor justo.
Esos ingredientes son los que lleva la tarta original, pero no las cantidades.
He rebajado el azúcar y la nata, unos 50 gr de cada ingrediente.
La tarta es un 10, con una textura suave, pero a la vez firme, y se deshace en la boca.
Tampoco me encanta la base de galleta, pero si la lleva que sea muy fina y apenas se note porque sobre gustos… y si lleva cobertura, que sea con una ligera capa de alguna mermelada especial.
Como en todas las tartas de este tipo, es recomendable forrar el molde de 20 cm de diámetro con un papel de hornear pegado a la base y las paredes.
Ingredientes
500 gr de queso crema
4 huevos
150 gr de azúcar
40 gr de harina
200 gr de nata (35% materia grasa)
Procedimiento:
Batir el queso crema hasta ablandar el queso.
Añadir el azúcar hasta incorporar.
Añadir los huevos de uno en uno.
Incorporar la harina.
Por último, verter la nata.
Evitar batir en exceso para no crear aire de más.
Hornear a 210° durante 40 minutos. Abrir el horno al terminar la cocción, y mantenerla dentro unos minutos. Después de unas horas en frío, estará más consistente y tendrá más sabor.
Nota:
He modificado ligeramente la cantidad de azúcar y la nata, respecto a la original, del restaurante La Viña, https://lavinarestaurante.com/.
Cristina Pareja 