Un pastel de pescado de los de toda la vida, con huevos, nata, leche, y el pescado, concienzudamente desmigado.
Este pescado tiene muchas espinas y muy finas, por eso, desmigarlo es muy importante.
He aprovechado las pieles del pescado para hacer un crujiente, que siempre gusta.
Los pimientos, los he sudado por separado, para que resalte el color en el pastel.
Ingredientes:
- 4 cabras
- 125 ml de leche
- 124 ml de nata
- 400 gr de huevos
- 1/2 pimiento verde
- 1/2 pimiento rojo
- 1/2 pimiento amarillo
- Sal
- Pimienta blanca
Salsa rosa
- 1 huevo
- Gotas de limón
- Aceite de girasol (cantidad suficiente)
- 5 gr de tomate concentrado
- 10 gr de coñac
- Sal
Corteza de pescado
- Las pieles de los pescados
- Aceite de girasol (cantidad suficiente)
- Sal
Preparación:
- Filetear los pescados y cocer muy suavemente en la leche y la nata. Sazonar.
- Colar y reservar el líquido para el pastel.
- Enfriar para desmigarlo y así, retirar las espinas cuidadosamente.
- Mezclar el pescado desmigado, los huevos y la nata. Sazonar.
- Los pimientos se cortan en juliana y la otra mitad en trocitos pequeños irregulares.
- Sudar los pimientos por separado, para evitar que los colores se mezclen, en un poco de aceite y suavemente.
- Añadir los pimientos troceados, a la mezcla de huevos, nata, leche y pescado desmigado.
- Reservar los cortados en juliana para decorar.
- Hornear al baño María a 170° durante 1 hora aproximadamente. Verificar la cocción pinchando con un palillo.
- Para las cortezas de pescado:
- Retirar las pieles de los pescados, y eliminar los restos, para que la piel quede limpia.
- Hornear a 90°, sobre un papel sulfurizado hasta que estén secas. Dependerá de la cantidad de pieles, el tiempo de secado.
- Una vez secas y frías las pieles, freír y sazonar.
Buen provecho.