El aprovechamiento en la cocina, se basa sobre todo, en una buena organización del menú. Aunque es cierto, que a pesar de la previsión, no podemos evitar que las verduras y las frutas de verano, maduren rápido.
Por tanto, lo recomendable es conservarlas en lugares, donde la temperatura sea más baja a la ambiente. Lo ideal es comprar a menudo y poca cantidad, para disfrutar de los alimentos en buen estado.
Una forma de aprovechar fruta que madura rápido, es convertirla en un postre, con mucho sabor y sin ningún añadido de azúcar.
Con unos plátanos bien maduros, una fruta tropical, la carambola, y cacao puro, ya tenemos el relleno del postre.
Para la base necesitamos, cacahuetes, crackers integrales, y unos pocos arándanos, nada mas.
Preparar el helado de plátano, tiene cero dificultad, porque se trata de congelarlos, triturarlos, para convertirlo en un cremoso helado.
Al triturarlos, podemos añadir los aromas que más nos guste, como la canela, jengibre en polvo, ralladura de coco, pepitas de chocolate, o nuez moscada, por ejemplo.
El molde mide 35 por 12 cm, pero podéis acoplar la tarta a un molde similar. Debe quedar la base bien extendida y compacta.
Los ingredientes:
Para el relleno,
- 550 gr de plátanos
- 1/2 cucharadita de nuez moscada (opc.)
- 1 carambola
- Gotas de sirope de agave
- Gotas de agua
- 1 cucharadita de cacao puro
Para la base,
- 100 gr de cacahuetes
- 100 gr de crakers integrales
- 200 gr de arándanos rojos deshidratados
Preparación:
Debemos congelar los plátanos sin piel, el día anterior.
Al día siguiente, comenzaremos con la preparación.
Trituramos los cacahuetes hasta crear una pasta y reservamos.
Molemos los crakers. Añadimos los arándanos y trituramos.
Añadimos la pasta de cacahuete y cubrimos la base, ayudándonos con una cuchara.
Trituramos los plátanos congelados con la nuez moscada, y cubrimos la base. Refrigeramos. 
Este molde tiene una base que se acopla por encima, o se usa de forma independiente.
Para que podamos sacar la tarta de este molde, hay una abertura en la base de la caja, para empujar hacia arriba, con ayuda de la base y así sacar la tarta de una sola vez, eso si, congelada.
Cortamos la carambola en rodajas muy finas y glaseamos muy suavemente, con unas gotas de sirope de agave y dos cucharadas de agua. El calor dará dulzor.
Fruta carambola y otra en rodajas
Sin que pierdan la forma, retiramos del calor.
Decorar la tarta con cacao es algo que le va muy bien al sabor del plátano. Con un colador espolvoreamos el cacao.
Decoramos con rodajas de carambola.
Cristina Pareja 